Tras la definitiva sentencia del Tribunal Supremo (mayo de 2013) a favor de la eliminación de las cláusulas suelo de las tres entidades demandadas (BBVA, Cajamar y BNG) llegó el aluvión de demandas por parte de afectados de otras entidades bancarias que entendieron que la decisión del Alto Tribunal les favorecía y les cargaba de razón ante la habitual negativa de sus entidades bancarias a negociar y eliminar sus cláusulas suelo, igualmente abusivas.
La gran mayoría de esas demandas han ido llegando a los tribunales en el primer semestre de 2014 y, especialmente en los últimos meses, hemos asistido a un goteo constante de sentencias favorables a los consumidores en su intento de eliminar la cláusula suelo de sus hipotecas. No sólo desde juzgados de primera instancia si no también siendo ratificadas en las Audiencia Provinciales.